El alcalde de Haría, Marci Acuña, junto al concejal de Patrimonio y Cultura, José Pérez Dorta, procedieron ayer al descubrimiento de una placa en reconocimiento a Emilio Quesada González, ya fallecido, y a Emilio Quesada Acosta, considerados los ‘últimos pastores de Guinate’.
El homenaje, en la calle La Majadita de dicha localidad, tuvo lugar coincidiendo con la celebración de las fiestas en honor a Nuestra Señora de Lourdes, contando con la presencia del propio Emilio Quesada hijo, quien estuvo acompañado por sus familiares, así como de otros miembros de la Corporación municipal.
El Consistorio norteño reconoce así la labor de ambos pastores y risqueros, que forman parte de la historia de Haría por el compromiso y la solidaridad mostradas en la búsqueda y rescate de las personas accidentadas o perdidas en las zonas más peligrosas del macizo de Famara.
Y es que el conocimiento que estos vecinos poseían de las veredas y de los lugares más intransitables de la zona, así como su valentía, fue fundamental para salvar la vida de muchas personas, como reza la placa inaugurada.
El Ayuntamiento norteño continúa así con su intención de reconocer la labor de aquellos vecinos que han contribuido, de una manera u otra, al desarrollo del municipio y a escribir la historia de Haría desde distintos ámbitos, dejando una huella imborrable en la memoria colectiva de todo un pueblo.