Existen 50 sombras de mujeres
que me van detrás,
yo les digo que no desesperen,
que cada una tendrá su lugar.
Llevo la lista completa
con cada petición,
todas estarán satisfechas,
no habrá ninguna reclamación.
Sé a cuál le gustan grandes
y a cuál de menor tamaño
y, aunque el día tenga 24 horas,
yo me las apaño.
Estoy corro que corro,
de aquí para allá,
pero por las noches
es cuando mejor puedo trabajar.
50 sombras para mí,
cada una tiene su jardín,
una casa, un perro
y un marido feliz.
Con ellas saco lo mejor de mí,
mis manos no paran quietas
y ellas siempre están dispuestas,
dispuestas a repetir.
Los esposos están encantados
con mis manos de malabarista,
mis servicios son especiales,
para ellos también tengo
precios normales.
Todos saben dónde vivo,
pero si me tengo que exponer
para eso tengo mi cartel:
“Zapatería Paco,
Arreglamos tus zapatos.”