El Mirador de Guatifay

gregorio

Por Gregorio Barreto Viñoly

 

 

Homenaje a Don Pedro Hernández Cerdeña en su centenario

El día 15 de este mes se celebró un merecido y emotivo acto de homenaje al maestro centenario, Don Pedro Hernández Cerdeña, en la sede de la UNED en Arrecife, con motivo de su centenario, al haber nacido en Arrecife en el mes de noviembre de 1914. El acto estuvo organizado por la Asociación Mercedes Medina Díaz, con la intervención de Don Juan Cruz Sepúlveda y con la colaboración del Gobierno de Canarias, el Cabildo Insular de Lanzarote, el Ayuntamiento de Arrecife, la UNED y el Centro de Profesorado de Lanzarote, lo que significa un orgullo para el municipio de Haría, que es una cuna de sus raíces, como un centenario más, ante una numerosa asistencia de autoridades, compañeros de Magisterio y público en general, muy ameno.

 

Don Pedro Hernández Cerdeña fue maestro de Educación Primaria durante todo su vida activa, ejerciendo en la ciudad de Arrecife, concretamente en la Escuela que estuvo ubicada frente al Parador Nacional de Turismo, durante unos treinta años, cuyo centro se llamaba Orientación Marítima, atendiendo a unos cuarenta alumnos y hasta a más, cuando se decía entonces “gana menos que un maestro de escuela”.

 

Don Pedro ha tenido la suerte de gozar de una buena salud, en sus años de ya algo mayor, hasta el punto de que fue pregonero de las Fiestas de San Ginés de Arrecife en el año 2010, denotando aún su vigor, con 96 años.

 

Fue casado con Doña Dolores Spínola Ferrer y tuvo ocho hijos, apellidados Hernández Spínola, conociendo en especial a dos de ellos, Francisco, que es actualmente consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad del Gobierno Autónomo Canario, y Manuel, que ha estado dedicado a diversas actividades, entre ellas la información y el montaje de emisoras.

 

Esta familia ha sido conocida por ‘Los Fierros’, y ello en honor a que tuvo un abuelo llamado Francisco Hernández Fierro, que fuera notario de Lanzarote.

 

Don Pedro es hijo del primer médico nativo que salió del municipio de Haría, llamado Don Francisco Hernández Arata, que no llegó a ejercer nunca la profesión, y de María Cerdeña Bethencourt. Vivieron en la Villa Dolores y en la casa que ahora es sede del Museo de César Manrique en la zona de La Cañada, o Malpaso.

 

Es nieto, como se dice, de Francisco Hernández Fierro y de Dolores Arata Perdomo, que fueron los padres de los varios hermanos Hernández Arata, como fue además, el notario de Lanzarote, Don José Hernández Arata, y varias hermanas.

 

Con este homenaje se quiere premiar a una persona dedicada toda su vida a la enseñanza, y que su longevidad le ha llegado a tanto como hasta a cumplir el siglo.

 

Esta familia está entroncada con los referentes ancestrales desde antes de la creación del edificio de Villa Dolores, que naciera desde el patriarca Don Ambrosio Perdomo Luzardo, pasando por su hijo Salvador Perdomo Cabrera, que fuera alcalde de Arrecife, para que luego su hija Rafaela Perdomo Brito casara en 1851 con Don José Arata Álvarez, oficial de la Marina Mercante, y su hija Dolores Arata Perdomo contrajera matrimonio con el indicado notario Francisco Hernández Fierro, en 1871.

Accesibilidad
Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad