Las calles del pueblo de Haría se convirtieron el pasado fin de semana en el epicentro del Carnaval de Lanzarote, con miles de personas que se acercaron al municipio norteño desde todos los rincones de la Isla para disfrutar de un evento que se ha convertido ya en cita ineludible en el calendario por su espíritu familiar y cercano, recordando a las fiestas de antaño.
El viernes por la mañana tuvo lugar el pasacalle a cargo de los alumnos del CEIP San Juan y del IES Haría, mientras que por la noche se celebró el Encuentro de Murgas, presentado por el humorista Matías Alonso, que contó con la participación de la agrupaciones ganadores del concurso del Carnaval de Arrecife.
Las carnestolendas no defraudaron, a pesar de las inclemencias meteorológicas. Bajo la alegoría de este año, ‘El Bosque Encantado’, el pueblo de Haría acogió el sábado los actos centrales y más multitudinarios del Carnaval. Por la mañana, se celebró el Carnaval Infantil con la actuación de comparsas, murgas y los alumnos de la Escuela de Bailes Latinos del Norte, en la Plaza.
Tras el tradicional Coso, con desfile de carrozas, murgas, comparsas, batucadas y un gran número de mascaritas, fue el turno de la verbena, que se extendió hasta altas horas de la madrugada. Ya el domingo, la fiesta carnavalera continuó en el municipio norteño con la celebración de la primera edición del Carnaval de la Tapa, que estuvo amenizado por distintas actuaciones musicales, finalizando con el Entierro de la Sardina en la Plaza de Haría.
